Hace 11 años pedí a mi hermano I. que se quedara con toda mi colección rolera pues yo sabía que no jugaría y que estaría a buen recaudo. Ahora, 11 años mas tarde, en una tarde familiar, me ha echo entrega de todo lo donado y resulta ¡que no se había desecho de nada!
Madre del amor hermoso la alegría y sorpresa que me ha causado!
No solo han aparecido manuales ancianos llenos de recuerdos, sino hojas de aventura y post-it con escritura rolera y manchas de gusanitos...
Así, como si de fardos de droga en aduanas fuera...
La campaña de la Dragonlance en inglés y módulo a módulo...
Las cajas emblemáticas y llenas de accesorios de la editorial Zinco...
Pero no solo me ha devuelto todos los manuales antiguos de los 90', también han aparecido las decenas y decenas de miniaturas de D&D pintadas y colecionables... calculo 200-250 miniaturas.
Las gigantes molan mucho...
A saber las cosas que aparecen en este cajón...
Bueno tengo ahora vício para rato con el D&D,
Nos cemos en las mazmorras!!!
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